Conmoción en el mundo del espectáculo. Tras varias semanas en las que han salido a la palestra diversos escándalos de abusos sexuales, como los protagonizados por Kevin Spacey o El Dalai Lama, la voz de la discordia se ha hecho publica esta mañana. Un famoso productor Hollywood, que prefiere permanecer en el anonimato por miedo a arruinar su carrera, ha declarado en una entrevista a la cadena árabe Al Jazeera, que jamás se ha aprovechado de una mujer en toda su carrera.
El productor ha declarado haber tenido muchas oportunidades y que muchos de sus colegas siempre se han mofado de él por ello, pero cree que, tal vez por su frenético estilo de vida y el efecto del consumo prologando de drogas sintéticas, siempre antepuso sus principios a la tentación del momento. Brad Pitt y Quentin Tarantino, conocidos por su larga carrera de apoyo y silencio con los acosadores, han declarado confusos no saber qué ha podido pasar ni conocer la identidad de este productor.
Al parecer, fueron las actrices Nicole Kidman y Wendy Testaburger, conocidas también por sus discursos contra el maltrato, quienes animaron al productor a que hiciera público su caso. Según Kidman: "He participado en varios de sus castings y nunca me hizo comentarios salidos de tono. Siempre me trató de una manera muy correcta y sólo preguntó por mi carrera, parecía no tener miedo de que le acusaran de feminista por tratar a las mujeres como seres humanos".
