El polémico Certamen Internacional de Pedofilia ha arrancado hoy sin incidentes de gran calibre, en Cockington, Reino Unido.
Aunque este encuentro levantó las sospechas de varios malpensados por el simple hecho de celebrarse cerca de varias guarderías de la localidad, al final se limitaron a manifestarse desnudos cerca de la sede. Algo que no molestó a ninguno de los asistentes porque, como declararon desde la organización: "Están por encima de nuestro target de interés".
Este año, el principal punto del certamen es la creación de una competición de pedofilia internacional que, como se hace en la Champions League, permita "jugar" a los campeones de cada país. Una competición que supone un auténtico sueño para muchos pero que trae de cabeza a la Organización de Pedófilos Internacional.
Según Giacomo Testa, representante italiano de la organización: "No conseguimos poner en marcha la liga porque tenemos discrepancias sobre el estilo de puntuación. Muchos quieren que cuente el exhibicionismo pero otros somos más favorables de que si no hay acercamiento no hay punto. Además, no sabemos si debemos permitir que se formen equipos o que cada uno opere por su cuenta porque siempre hemos sido lobos solitarios".
Representantes legales de todo el mundo siguen de cerca este certamen ya que no terminan de estar seguros de la legalidad de la competición que plantean. "Sabemos que la pedofilia se mueve en marco legal indefinido y consideramos que esto debe corregirse para que los practicantes de tan noble arte lo hagan con la conciencia tranquila", comenta el juez Martínez, "Hemos pedido a los políticos que aclaren lo antes posible este vacío legal para saber si tenemos que trabajar o nos podemos ir de vacaciones tranquilos".
Al preguntarle sobre este tema, el Presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha confesado que a él le gustan las competiciones de todo tipo, sobre todo si hay pelotas de por medio.