Hillary Clinton abandona la política y se une a Estado Islámico como "muyahidín neoliberal"

"Después de la derrota que he sufrido, lo menos que puedo hacer es dedicarme en cuerpo y alma a promover algo tan inofensivo como la sharia", comenta Clinton

En unas declaraciones sorprendentes y después de la intensa resaca electoral estadounidense, Hillary Clinton decide dar un giro de 360 grados a su carrera política y admite a micrófono abierto delante de miles de seguidores que: "Dado que no pude representar fielmente al establishment más rancio y proteger sus intereses al perder las elecciones frente a un personaje tan moderado y respetuoso como Donald Trump, no me queda otra alternativa que probar suerte en el Estado Islámico como muyahidín neoliberal".

Abu Bark al-Baghdadi, máxima autoridad del autodenominado Estado Islámico hace ya algún tiempo había declarado que Hillary Clinton sería un excelente fichaje y que lo más probable es que fuese destinada en Raqqa, bastión de "Baghdadito", como lo suelen llamar sus mejores amigos y personas más cercanas.

"Aunque la cosa está que arde en Raqqa, no me importaría ser una promotora directa de la Sharia y, con fusil AK-47 en mano, dejarle claro al mundo que aunque haya perdido las elecciones de una forma vergonzosa, aún puedo estar en el candelero dando guerra", afirma Hillary entre sollozos y lágrimas de cocodrilo.

Cuando se le pregunta qué será de su marido Bill Clinton, Hillary admite que su amor y admiración por los valores islámicos moderados por los que tanto ha luchado son más fuertes que estar con, según sus propias palabras: "Un tipo extravagante anclando en el pasado que gasta lo poco que le queda en timbas ilegales de póker".