El producto está pensado para aquella gente que quiere benificiarse de una dieta exclusivamente carnívora, pero teme un ataque psico-terrorista por parte del colectivo vegetariano radical
Para conseguir esa apariencia 'saludable' se han usado colorantes y fosfatos tóxicos, bajo el lema: "Lo importante es la conciencia del consumidor, no el cáncer"