El caso Lezo ha supuesto un punto de inflexión para el siempre cauto y callado, Mariano Rajoy. La investigación sobre la corrupción en la empresa pública de aguas Canal de Isabel II, de la Comunidad de Madrid, y la dimisión de su siempre admirada Esperanza Aguirre ha sido la gota que colma el vaso.
Según el propio Presidente del Gobierno: "Se les va a caer el pelo a todos. He decidido escuchar más que nunca a la ciudadanía y por ello, anuncio que vamos a poner en marcha una comisión independiente para esclarecer todos los casos de corrupción del Partido Popular. Lucharemos sin descansar contra esta gentuza, no puede ser que el pueblo español tenga que aguantar este tipo de espectáculo, no lo merecen y nadie mejor que el Gobierno para demostrar de nuevo que los corruptos no tienen cabida en nuestra sociedad. Doy mi siempre sincera palabra de que pagarán lo hecho y asumirán su responsabilidad aunque me vaya la vida en ello, aunque yo mismo tenga que detenerlos, reducirlos, leerles sus derechos e incluso tirarles la pastilla de jabón en las duchas de sus respectivos centros penitenciarios. Sus burdos intentos de redimirse de sus actos ante el Señor no servirán de nada".
Es así como se comenzarán a investigar tramas como la Púnica, la Gürtel, el CAM e incluso la caja B del partido, entre muchas otras. Esta comisión no ahorrará en recursos, cuyos fondos aún no se ha aclarado de dónde saldrán, y hará que se produzcan las dimisiones necesarias para que sus votantes reafirmen así la demostrada incorruptibilidad de Rajoy.
"Vamos a pactar con Ciudadanos, PSOE e incluso con las facciones más limpias y neoliberales de Podemos para atrapar y juzgar a los corruptos", afirma Mariano Rajoy.
Según Pablo Iglesias, esta medida llega tarde pero se alegra de que por lo menos llegue: "El señor Presidente se ha puesto a trabajar porque ha visto la clase de calaña que puebla su partido. Esperamos que se trate de un plan severo y consecuente que enorgullezca a los españoles. Además me he ofrecido para enseñar al señor Rajoy cómo limpiar un partido de toda persona que molesta".
